lunes, 23 de agosto de 2010

En pos de la Victoria por Patricia Hashuel!

Hoy mi primera nota va basada a una historia de superación personal en la cual un hombre violanista demuestra su gran poder espiritual a través de su violin. He aqui la historia, espero que les guste.

"Erase una vez un gran violanista llamado Paganini. Una noche, la platea de un teatro repleto de admiradores estaba preparada para recibirlo.  La orquesta entró y fue aplaudido. El director aparecio y ovacionado.

Más cuando la figura de Paganini surgió, triunfante, el público deliró. Paganini colocó su violin en el hombro y lo que se escuchó fue indescriptible.

De repente un sonido extraño interrumpió el solaz de la plaza. Una de las cuerdas del violin de Paganini se habia roto. El director se detuvo, la orquesta paró. El público contuvo su aliento.

Pero Paganini no reaccionó. Mirando su partitura continuó arrancando sonidos deliciosos de un violin con problemas. El directo de la orquesta exaltados, volvieron a tocar.

Antes del que el público se serenara, otro sonido perturbador derrumbó la atención de los asistentes. Otra cuerda del violin de Paganini rota. El director se detuvo nuevamente, la orquesta lo siguió. Pero Paganini siguió como si nada hubiese sucedido, él obvió la dificultad y avanzó sacando sonidos de lo imposible.

El director y la orquesta, impresionados, volvieron a tocar. Pero el público no podría imaginar lo que estaba por suceder. Todas las personas, atónitas, exclamaro: ohhhhh!!! Una tercera cuerda del violin de Paganini se rompió. El director se paralizó. La orquesta se calló. La respiración del público se detuvo. Pero Paganini continuó. Como si fuese un contorcionista musical, arrancando todos los sonidos de la unica cuerda que quedaba de su violin destruido. Ninguna nota musical fue olvidada.  El público paso  del silencio a la euforia, de la inercia al delirio.

Paganini alcanzó la gloria. Su nombre corrió a través del tiempo. No es apenas un violinista genial. Quedó como un simbolo del profesional que continua adelante frente a lo imposible.

¿Ultimamente se han estado rompiendo las cuerdas de tu violin? ¿Ya no sabes que inventar para seguir tocando? ¿Te parece que es imposible seguir de esta maenra? ¿Quisieras que las cosas cambien pero cada día se ponen peor?

Necesitamos reconocer que la vida siempre nos dejará una "Ultima cuerda".  Así que cuando te sientes desanimado, busca la manera de no desistir.

Aun existirá la "Cuerda" de la persistencia inteligente, del intentar una vez más, del dar un paso más, de correr un nuevo riesgo, de poder mirar con otros ojos, de encontrar una nueva mirada o de encontrar un enfoque nuevo.

Despierta el Paganini que vive dentro tuyo y encuentra la manera de seguir tocando aunque la orquesta y el director se hayan detenido y continua hasta vencer.

Y te digo que, sí acaso creyeras que ya estás en el fondo del pozo, y no tienes cuerdas ni violin que tocar, aun te queda una posibilidad que no has tenido en cuenta y que podría ser tu Stradivarius:

Apostar y Creer en ti mismo.

Si otras veces has encontrado la manera de salir, hoy puede ser igual.